La trigésima cuarta Jornada Mundial de la Juventud se celebró en enero de 2019 en Panamá, Centroamérica. El tema "He aquí la sierva del Señor ; hágase en mí según tu palabra" enfatizó el significado del acontecimiento destacando la respuesta de María al llamamiento divino para una misión salvífica e invitando a los jóvenes a tomar un tiempo para discernir la posibilidad de una vocación religiosa.
Sor Marie-Bernadette Vercela y Sor Claudine Saint-Hilaire, Provincia de Haití
Agradecemos al Señor que nos ha concedido la gracia de participar en la JMJ de Panamá. Esta experiencia ha fortalecido nuestra fe.
Éramos 190 : 17 sacerdotes, 8 religiosas y 165 jóvenes de 18 a 28 años de edad. Cuando llegamos, tuvimos una cálida bienvenida : fuegos artificiales, música, coro. Estábamos emocionados y esto compensó la fatiga de la jornada.
Estos fueron los tiempos culminantes de la semana :
- la celebración eucarística en varios idiomas con la participación de varios países,
- la adoración del Santísimo Sacramento,
- las Laudes,
- la inauguración oficial de la JMJ por el arzobispo de Panamá,
- la acogida del Papa Francisco,
- la Vigilia de la oración Mariana,
- la Misa de clausura.
Otras actividades llenaron nuestros días, por ejemplo, la visita a los enfermos y los ancianos, la plantación de árboles, la noche cultural.
Nuestras diferencias de nacionalidad no nos impedían estar unidos y formar un solo cuerpo en Cristo.
El lunes 21 de enero, muy temprano, nos pusimos en camino hacia Villa Lucre donde estábamos alojados en familias panameñas.
La catequesis se centró en el tema : "He aquí la sierva del Señor ; hágase en mí según tu palabra". En sus charlas, los obispos nos exhortaron a permanecer siempre en vestimenta de servicio (con nuestros delantales) para servir a Dios y a nuestros hermanos y hermanas, como María. Canto apropiado entonado con un solo corazón : "Como Él, saber poner la mesa".
Vivimos la JMJ en la fe. Cuando proclamamos en el credo que la Iglesia es una, católica y apostólica, verdaderamente nos une en una sola fe a pesar de nuestras diferencias de lengua, cultura y mentalidad. Las familias anfitrionas superaron la barrera del miedo, la desconfianza, la indiferencia, para recibirnos con cordialidad porque nuestra fe común nos unía. Esto nos permitió experimentar la universalidad de nuestra Iglesia.
Gracias a nuestra Provincia y al Comité Nacional para la Pastoral de los jóvenes de Haití que nos dieron la oportunidad de vivir este extraordinario acontecimiento de Iglesia.
Sor Magdeline Singh, Provincia de India del Nordeste/Nepal
Sor Magdeline Singh, Religiosa de San José de Cluny, de la Provincia India del Nordeste/Nepal, tuvo el privilegio de participar en la JMJ con un grupo de 56 peregrinos del Movimiento juvenil Católico de la India (ICYM). El evento ocurrió en dos fases :
- Estancia en la diócesis de Santiago Atalaya : los peregrinos indios tuvieron el placer de conocer a los fieles de la diócesis de Santiago Atalaya. Se han organizado diversas exposiciones, ejercicios espirituales, peregrinaciones, encuentros amistosos e intercambios culturales para enriquecer y fortalecer los lazos de la fe cristiana.
- Jornada Mundial de la Juventud : estos días han sido un foro universal para los jóvenes de todo el mundo para celebrar lo que están viviendo con Jesucristo. Los principales puntos destacados de la JMJ fueron :
- Discurso del Papa Francisco a todos los peregrinos reunidos
- Vía Crucis
- Vigilia de oración, con testimonios
- Misa de Clausura, marcada por la esperanza.
Durante la ceremonia de clausura, el Papa Francisco anunció oficialmente que la próxima Jornada Mundial de la Juventud se celebrará en 2022 en Portugal.
Sor Magdeline da testimonio de su experiencia personal como peregrina de la JMJ : “Mi viaje como animadora delegada y peregrina de la Jornada Mundial de la Juventud 2019, me ha permitido dar testimonio de mi fe en Cristo, en compañía de los jóvenes. Me ha maravillado ver a tantísimos jóvenes que buscaban en la persona de Jesucristo el verdadero significado y la meta de sus vidas. He podido admirar :
- el amor por la oración
- la apertura de mente
- su atracción por el Sacramento de la reconciliación
- y, sobre todo, su deseo de celebrar sus vidas todos los días
Habiendo sido testigo de la vibrante y entusiasta fe de los jóvenes de la iglesia actual, sé que ésta será siempre joven. Hay muchos jóvenes como el joven rico del Evangelio (Lucas 18, 18-30), tienen todo menos a Jesús. Como animadora de jóvenes, estoy convencida de que una vida gozosa y llena de sentido, vivida en Jesucristo y compartida con los jóvenes dará ciertamente más sentido a sus vidas. Esto dará después una base sólida a su fe cristiana y a una vida llena de significado bien vivida en la sociedad. »
