En su intervención, el Papa explicó el sentido de su visita:
« Hemos venido para atraer la atención del mundo ante esta grave crisis humanitaria y para implorar la solución de la misma. Como hombres de fe, deseamos unir nuestras voces para hablar abiertamente en vuestro nombre».
Llevó al Vaticano a doce refugiados sirios, entre ellos seis menores, y han sido acogidos por la comunidad de San Egidio.
Pero hay que ir más lejos, a las causas de la crisis migratoria:
« Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional para que responda con valentía, afrontando esta crisis humanitaria masiva y sus causas subyacentes, a través de iniciativas diplomáticas, políticas[…] como también a través de esfuerzos coordinados entre Oriente Medio y Europa. » Hay que poner fin a la guerra : « Estamos unidos[…] en nuestra solicitud para promover la resolución de los conflictos a través del diálogo y la reconciliación. »
Les pedimos que se unan a las Hermanas de San José de Cluny en la oración por todos los refugiados que viven esta crisis humanitaria y por una solución fundada en la compasión, el diálogo y la reconciliación.